Lectura de hoy

Ángel de la muerte

Eclesiastés 7:14

En el día del bien goza del bien, y en el día de la adversidad, reflexiona. Dios hizo tanto...

REFLEXIÓN

En cierta ocasión, el amo de una viña grande mandó a uno de sus mejores criados a realizar...

» Continúa     » Escuchar Audio  Escuchar Audio

Reciba diariamente la Lectura de Hoy en su correo electrónico sin ningún compromiso.

Suscribete a Unanimes

Estudio Bíblico de la semana

F.05.- El fruto del Espíritu

Lecturas Estudio detallado del fruto del Espíritu Santo y su significado en la vida del creyente ...

» Descargar     » Escuchar Audio  Estudios

Ni una sola persona regresó para darme las gracias

Publicación:  lunes 29 mayo 2023   |  Escuchar Audio  Escuchar Audio |  Enviar a un amigo Enviar a un amigo



Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:17-18


Reflexión

Se dice que en el lago Michigan, una noche de gran tormenta, un barco chocó contra un barco de pasajeros - más o menos a dos kilómetros del pueblo de Winnetka, Illinois. De los 393 pasajeros, 279 se ahogaron. Fue un gran desastre.

Un hombre llamado Edward Spencer, al ver el desastre, se metió en el lago y trató de ayudar y salvar a algunos pasajeros. Uno por uno los trajo a la playa, regresando otra vez por uno más. En total Edward Spencer pudo salvar a 17 personas.

Desgraciadamente, en el transcurso de este acto de heroísmo, Edward desfalleció de cansancio. Los nervios en sus piernas estaban tan dañados que nunca más volvió a caminar. De ahí en adelante se quedó paralítico, prisionero de por vida de su silla de ruedas.

En su cumpleaños, 18 años después, alguien le pidió relatar su experiencia y contar lo que más le impresionó de esa noche.

Edward respondió: "Ni una sola persona de los 17 que salvé regresó para darme las gracias. ¡Ni uno solo!"

Mis queridos hermanos y amigos, imaginemos lo que piensa el Señor de nosotros, ¡cuando olvidamos desde dónde nos sacó y hasta dónde nos ha llevado! La causa de nuestro mal agradecimiento es que nos levantamos cada mañana y no vemos las muchas razones por las cuales podemos y debemos dar gracias. Por el contrario, ambicionamos lo que no tenemos y frecuentemente nos quejamos, pues, de acuerdo a nosotros, el Señor no nos contesta nuestras oraciones. Por dicha el Señor nos ama por lo que Él es y no por lo que somos nosotros. Así se define Su gracia, nos da lo que no merecemos.

Que Dios te bendiga