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El camello atado

Publicación:  viernes 5 agosto 2022   |  Escuchar Audio  Escuchar Audio |  Enviar a un amigo Enviar a un amigo



¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerlo, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte o sea de la obediencia para justicia? Pero gracias a Dios que, aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina que os transmitieron; y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia. Romanos 6:16-18


Reflexión

Una caravana de peregrinos estaba viajando por el desierto.  Extenuados llegaron al final del día a un oasis para descansar.

El muchacho encargado del cuidado de los 20 camellos descubrió que le faltaba una soga para atar al último camello y no lograba encontrar nada que la pudiera substituir. El jefe de grupo, basado en su experiencia, le aconsejó simular el proceso de atar al camello. Le dijo que lo han atado tantas veces que en realidad no se dará cuenta si en verdad hay una cuerda o no.

A la mañana del próximo día todos se despertaron bien temprano. El muchacho desató a los 19 camellos y la caravana se marchó. De repente se dieron cuenta que faltaba el camello número 20. Cuando lo fueron a buscar se dieron cuenta que, como "no fue desatado”, se quedó quieto en su lugar, ¡sin probar si podía moverse!

Mis queridos hermanos y amigos, así son nuestros malos hábitos, son como cuerdas invisibles que nos hacen prisioneros de nuestras propias conductas. Librémonos de esas ataduras. El Señor nos desea libres y productivos en Su Reino. Abandonemos la vieja naturaleza y las viejas costumbres y adoptemos los principios del Reino: Verdad, justicia  y amor, esos son los valores de Jesús y deben ser los nuestros.

Que Dios te bendiga