Lectura de hoy
Al rojo vivo
1 Juan 4:4
Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros...
REFLEXIÓN
Cierto día un joven estaba en el taller de un herrero, y este se mofaba del muchacho diciéndole:...
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Estudio Bíblico de la semana
H.02.- La era de la inocencia
El presente estudio analiza, dentro de la historia bíblica, el intervalo de tiempo ocurrido entre la creación del ser humano hasta su caída. ... |
Predicador vanidoso
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Ciertamente Dios no escucha lo que es vanidad; ni siquiera lo mira el Omnipotente. Job 35:13
Reflexión
El sermón fue una obra maestra. Los comentarios de los feligreses confirmaron lo que el predicador ya sabía: había estado estupendo. La última persona en salir fue una dama de edad muy avanzada.
—¿Le han dicho a usted alguna vez que es una maravilla? —preguntó con suavidad.
En el “no” con que le contestó no había el menor vestigio de convicción. Pues entonces — le dijo— ¿de dónde sacó usted la idea de que lo es?
Mis queridos hermanos y amigos, la vanidad es tan atractiva que nos hace caer a todos en sus manos. A partir de ella trasladamos nuestras acciones a actos egoístas que buscan nuestra gloria nada más. Las personas y nuestro Dios pasan a un segundo plano al tiempo que nosotros nos sentamos en el trono de nuestra vida. Descubramos la vanidad a tiempo y solo rindamos culto a Aquel que lo merece… al Señor.
Que Dios te bendiga
—¿Le han dicho a usted alguna vez que es una maravilla? —preguntó con suavidad.
En el “no” con que le contestó no había el menor vestigio de convicción. Pues entonces — le dijo— ¿de dónde sacó usted la idea de que lo es?
Mis queridos hermanos y amigos, la vanidad es tan atractiva que nos hace caer a todos en sus manos. A partir de ella trasladamos nuestras acciones a actos egoístas que buscan nuestra gloria nada más. Las personas y nuestro Dios pasan a un segundo plano al tiempo que nosotros nos sentamos en el trono de nuestra vida. Descubramos la vanidad a tiempo y solo rindamos culto a Aquel que lo merece… al Señor.
Que Dios te bendiga