Hoy es Mayo 11, 2025
Lectura de hoy
Tapices centenarios
Filipenses 1:6
…estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra la perfeccionará...
REFLEXIÓN
Los tapices españoles son muy famosos desde 1721. La calidad de las composiciones convierte...
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Estudio Bíblico de la semana
A.04.- Siguiendo a Jesús
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Este estudio nos lleva a reflexionar sobre la verdadera naturaleza del cristianismo como una forma de vida. ... |
Brille vuestra luz
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—Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la Ley?
Jesús le dijo:
—“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas. Mateo 22:36-40
Reflexión
Un caballero visitó una joyería, propiedad de un amigo suyo. Este le mostró una gran variedad de piedras preciosas. Entre las colecciones de piedras observó una de estas que apenas si tenía brillo, parecía estar sucia, no llamaba la atención. No revelaba su belleza como las demás.
--¿A qué se debe la diferencia? preguntó
El joyero, tomando aquella piedra en la mano, la frotó. Al contacto de sus manos estaba brillando con todo esplendor.
--¿Cómo es eso? --preguntó el caballero.
--Esta piedra es un ópalo que llamamos una piedra simpática, replicó el joyero. Su escondido esplendor brota tan pronto como uno la frota entre las manos.
Mis queridos hermanos y amigos, cuantas veces hemos estado con alguien con cara de amargura y nos alejamos en vez de acercarnos más. Sí, hay seres humanos que son como el ópalo del joyero, solo necesitan de nuestro amor para brillar. Está en nosotros y no en ellos convertirlos de seres amargos a joyas esplendorosas.
Que Dios te bendiga
--¿A qué se debe la diferencia? preguntó
El joyero, tomando aquella piedra en la mano, la frotó. Al contacto de sus manos estaba brillando con todo esplendor.
--¿Cómo es eso? --preguntó el caballero.
--Esta piedra es un ópalo que llamamos una piedra simpática, replicó el joyero. Su escondido esplendor brota tan pronto como uno la frota entre las manos.
Mis queridos hermanos y amigos, cuantas veces hemos estado con alguien con cara de amargura y nos alejamos en vez de acercarnos más. Sí, hay seres humanos que son como el ópalo del joyero, solo necesitan de nuestro amor para brillar. Está en nosotros y no en ellos convertirlos de seres amargos a joyas esplendorosas.
Que Dios te bendiga