Lectura de hoy
Al rojo vivo
1 Juan 4:4
Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros...
REFLEXIÓN
Cierto día un joven estaba en el taller de un herrero, y este se mofaba del muchacho diciéndole:...
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Estudio Bíblico de la semana
H.02.- La era de la inocencia
El presente estudio analiza, dentro de la historia bíblica, el intervalo de tiempo ocurrido entre la creación del ser humano hasta su caída. ... |
Naturaleza
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Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, dignatario de los judíos. Este vino a Jesús de noche y le dijo:
—Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro, porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él.
Le respondió Jesús:
—De cierto, de cierto te digo que el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios. Juan 3:1-3
Reflexión
Un maestro oriental vio cómo un escorpión se estaba ahogando y decidió sacarlo del agua, pero cuando lo hizo, el escorpión lo picó.
Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose. El maestro intentó sacarlo otra vez y otra vez el escorpión lo picó.
Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo: "Perdone, ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que intente sacarlo del agua lo picará?".
El maestro respondió: "La naturaleza del escorpión es picar, y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar". Y entonces, ayudándose de una hoja el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida.
Mis queridos hermanos y amigos, cuando experimentamos el nuevo nacimiento en el Espíritu, del cual habló Jesús a Nicodemo en la Lectura de Hoy, nuestra naturaleza cambia hacia una de perdón y amor. No la cambiemos si alguien nos hace daño, consideremos que ese, para cambiar, también debe nacer de nuevo.
Que Dios te bendiga
Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose. El maestro intentó sacarlo otra vez y otra vez el escorpión lo picó.
Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo: "Perdone, ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que intente sacarlo del agua lo picará?".
El maestro respondió: "La naturaleza del escorpión es picar, y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar". Y entonces, ayudándose de una hoja el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida.
Mis queridos hermanos y amigos, cuando experimentamos el nuevo nacimiento en el Espíritu, del cual habló Jesús a Nicodemo en la Lectura de Hoy, nuestra naturaleza cambia hacia una de perdón y amor. No la cambiemos si alguien nos hace daño, consideremos que ese, para cambiar, también debe nacer de nuevo.
Que Dios te bendiga