Lectura de hoy
No te quejes
Filipenses 4:11-13
No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación...
REFLEXIÓN
Un grupo de misioneros, caminaban de un pueblo llamado San Francisco a Santa Catarina Loxicha...
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Estudio Bíblico de la semana
Horno que no cocina
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Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! Filipenses 4:4
Reflexión
Voltaire cierta vez describió al hombre como un horno que se está calentando, siempre calentando, pero nunca cocina nada.
Al comentar este punto de vista, Harold Blake Walter señala que muchas personas viven sin gusto, arrastrándose a través de sus trabajos sin vitalidad; en una palabra, logran una temperatura como para continuar, pero realmente sin cocinar nada jamás.
Las cosas asombrosas suceden cuando una persona realmente se enciende y comienza el proceso de cocinar. Walt Whitman dijo de sí mismo: "Yo me estaba cociendo, realmente cociendo, pero Emerson me puso a hervir"
Qué descripción tan acertada de una personalidad dotada pero con falta de poder, hasta que el fuego del entusiasmo lo llevó al punto del hervor. Como resultado, Whitman creó poesía inmortal.
Mis queridos hermanos y amigos, ¿no habrá llegado el momento de dejar de "cocernos, realmente cocernos" y comenzar a encendernos con un entusiasmo renovado? El calor mental y espiritual creado por el entusiasmo puede quemar los elementos del fracaso y apatía de cualquier personalidad y desatar allí mismo un cúmulo de cualidades inusuales, aun insospechadas. Vayamos más allá de la cocción, aún del hervor y descubriremos los talentos y dones que el Señor nos dio y que jamás soñamos que teníamos.
Vivamos la vida con entusiasmo y optimismo. El Señor nos la dio y Él desea que la vivamos así.
Que Dios te bendiga
Al comentar este punto de vista, Harold Blake Walter señala que muchas personas viven sin gusto, arrastrándose a través de sus trabajos sin vitalidad; en una palabra, logran una temperatura como para continuar, pero realmente sin cocinar nada jamás.
Las cosas asombrosas suceden cuando una persona realmente se enciende y comienza el proceso de cocinar. Walt Whitman dijo de sí mismo: "Yo me estaba cociendo, realmente cociendo, pero Emerson me puso a hervir"
Qué descripción tan acertada de una personalidad dotada pero con falta de poder, hasta que el fuego del entusiasmo lo llevó al punto del hervor. Como resultado, Whitman creó poesía inmortal.
Mis queridos hermanos y amigos, ¿no habrá llegado el momento de dejar de "cocernos, realmente cocernos" y comenzar a encendernos con un entusiasmo renovado? El calor mental y espiritual creado por el entusiasmo puede quemar los elementos del fracaso y apatía de cualquier personalidad y desatar allí mismo un cúmulo de cualidades inusuales, aun insospechadas. Vayamos más allá de la cocción, aún del hervor y descubriremos los talentos y dones que el Señor nos dio y que jamás soñamos que teníamos.
Vivamos la vida con entusiasmo y optimismo. El Señor nos la dio y Él desea que la vivamos así.
Que Dios te bendiga